LAS MARCAS Y LA SOCIEDAD

Llegar a tener una marca poderosa, que conecte con las emociones más íntimas de los consumidores no es nada fácil.

Las marcas se construyen con muchos ingredientes, exactamente como ocurre con la personalidad de los seres humanos. Y estos ingredientes deben estar íntimamente relacionados con los conceptos y valores imperantes en la sociedad en que se desarrolla la marca.

La sociedad está en cambio constante, tanto social como tecnológico, por lo que las acciones de construcción de marca deben ser continuamente modificadas para adaptarse a los cambios.

La comunicación en sus distintas variables es sin duda la herramienta principal para este proceso, el eje central sobre el que pivota todo, porque establecer la relación más intensa posible con los consumidores es una labor que requiere una comunicación constante.